Tus clientes te están esperando, sólo tienes que salir a buscarlos
Vender es complicado, y no basta con anunciarse en medios de comunicación o repartir publicidad. Hacer una venta requiere dedicación, y, muchas veces, buscar un contacto directo y bidireccional con el cliente. Para esto se necesitan herramientas, como el marketing telefónico, que agilicen el proceso. No se trata sólo de resolver la ecuación cliente + necesidad = venta, sino de rentabilizar al máximo nuestros recursos dedicados a este fin para sacar el máximo partido.
Cuando una empresa no consigue hacer una venta, o no llega a los objetivos que tenía previstos, es principalmente debido a tres factores:
– Mal producto. Es muy común que el empresario esté convencido de que tiene el mejor producto o servicio del mercado y que la gente se va a volver loca por tenerlo, sin embargo, se encuentra con que no hay peces que pescar, o lo que es peor, ni siquiera hay agua en la que nadar. Se trata de un producto inútil por el que nadie está dispuesto a pagar.
– Público objetivo equivocado. En otras ocasiones el producto es bueno, sin embargo, la gente a la que uno se dirige no lo necesita o no está interesado en él. Muchas veces esta disfunción entre producto y consumidor está originada por una base de datos de poca calidad: sin una BBDD actualizada no hay ventas, tan sencillo como eso.
– Esperar a que los clientes lleguen. Si esperas que los clientes aparezcan por arte de magia, es mejor buscar un buen sillón, ya que esto no va a pasar. El marketing no consiste sólo en anunciarse, sino que debe ser concebido como una actitud proactiva que una empresa debe tomar para lograr sus objetivos comerciales.
Una vez superados estos hándicaps que nos obstaculizan nuestro camino al cliente, tenemos un producto de calidad y una buena base de datos, podemos comenzar a trabajar, podemos salir a buscar los clientes, eso sí, con las herramientas adecuadas.
Para optimizar recursos y evitar pérdidas de tiempo, el teléfono es una herramienta eficaz que nos permite realizar las gestiones necesarias de forma rápida. Utilizando el software adecuado, podremos hacer un seguimiento de aquellos clientes que muestran interés y que pueden terminar en venta, y descartar aquellos con los que no hay nada que hacer. Además, es esencial realizar un registro minucioso de cada contacto durante la campaña para conocer nuestros puntos fuertes y débiles, ya que, posteriormente estos datos deben analizarse para saber qué cosas debemos cambiar o reforzar.
El movimiento del mercado se ha ralentizado considerablemente en los últimos años, por ello hay que buscar formas de dinamizarlo, pues las necesidades están ahí, y con un buen argumentario y una mejor exposición, la venta estará cada vez más cerca.
¿Cuáles son vuestras estrategias para conseguir un cliente?