El liderazgo es una de las claves para alcanzar el éxito
Una de las claves en el éxito de cualquier proyecto empresarial es el equipo humano que lo lleva a cabo, por ello rodearse de buenos profesionales, pero también de buenas personas, es fundamental.
Pero, ¿qué podemos hacer para conseguir un equipo impecable? No es fácil crear un equipo cordial, competente y eficiente al mismo tiempo, pero a continuación, enumeramos algunos factores a tener en cuenta que nos ayudarán en este propósito:
– Diversidad. Dependiendo del tipo de proyecto que se vaya a llevar a cabo, se necesitará mayor o menor diversidad de personas. Pero es cierto que una mezcla de expertos en diferentes áreas o con personalidades muy diferentes, aportan un alto grado de creatividad que puede darle un buen impulso al proyecto o un giro positivo.
– Formación. Se trata de un factor importante, y no se trata sólo de la formación que cada uno trae de casa, sino de que se sigan formando para estar siempre al día con los últimos avances o novedades en los sectores que nos interesen. Hay que seguir aprendiendo, siempre.
– Lo que no suma, resta. Como hemos comentado al inicio del post, para llevar un proyecto al éxito hacen falta buenos profesionales, pero no menos importante es rodearnos de buenas personas. Si las habilidades profesionales de una persona son buenas pero no es capaz de integrarse en el equipo o crea tensiones, no compensa. Las aptitudes profesionales pueden aprenderse, las personales son más complicadas de adquirir. Por lo tanto, es más importante la actitud que la aptitud.
– Buscar colaboradores externos. Es posible que el equipo no esté preparado para afrontar determinadas tareas, o simplemente no disponga del tiempo necesario para ello. Para evitar sobrecargas de trabajo que pueden causar estrés y conflictos en el equipo, contar con la colaboración de un partner es una buena opción.
– Un buen liderazgo. Para que los esfuerzos de todos los componentes del equipo lleguen a buen puerto, es necesaria la presencia de un buen líder. Gastar energía sin saber cómo canalizarla agotará al equipo sin llegar a la meta. Un buen líder tiene que conocer los puntos fuertes y los puntos débiles de cada uno de los integrantes del equipo y saber sacarles el máximo partido.
Hay muchos otros factores que también influyen en la formación de un buen equipo de trabajo. Pero sin dudas, el más importante de los aquí señalados es el último: tener un buen líder que sepa exprimir el potencial del grupo. Citamos aquí una frase del filósofo y estratega Sun Tzu que resume muy bien la esencia de un buen líder:
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